Su llegada me sorprendió especialmente aquel invierno, traía aires alegres en un día gris... y me dijo lo más bonito que había escuchado hasta entonces.
Después se fue, veranos otoños y primaveras con ella. Descubrí entonces que, el invierno... no es frío sino su ausencia. Porque el frío en mí, es la ausencia de su calor.
Su llegada me sorprendió especialmente aquel invierno, traía aires alegres en un día gris... y me dijo lo más bonito que había escuchado hasta entonces.
ResponderEliminarDespués se fue, veranos otoños y primaveras con ella. Descubrí entonces que, el invierno... no es frío sino su ausencia. Porque el frío en mí, es la ausencia de su calor.
muchas veces la marcha de alguien importante se puede describir como un invierno frio y desolado.
ResponderEliminarMe gusto esa frase :)
saludos